Requisitos de la Escuela del siglo XXI
En este artículo intentaré hacer una
recopilación, a mi entender, de las necesidades “reales” que se han de cubrir
para poder hablar de una Escuela del siglo XXI, o si a algunos les apetece más
el vocablo, demasiado utilizado (y cansino) últimamente, la Escuela 2.0. Se
trata de una entrada que permite numerosa retroalimentación, para así, poder
ampliar esas exigencias, y poder llevar a cabo la necesaria transformación de
nuestras aulas, dotadas de manera rápida y descontrolada con muchos cachivaches
2.0, a una imprescindible Escuela moderna ,que se aleje del modelo de Escuela
anacrónico. También hemos de considerar interesante, un necesario período de
adaptación, o de transformación, para poder analizar las necesidades y, poder ir
modificando esa Escuela de manera gradual.
Las exigencias para esa
transformación las podríamos dividir en tres grandes bloques:
Tecnología, Currículum y Formación
docente, y Gestión del cambio, de los que describo a
continuación, a grandes trazos, las necesidades de cada uno de
ellos.
Tecnología
Los elementos tecnológicos, que
habría de poseer la Escuela del presente, para poder satisfacer las necesidades
reales de la Educación actual serían:
- Dotación individual del alumno, consistente en un ordenador, teléfono móvil, iPad u otro elemento similar, debiendo este elemento incorporarse una vez instaurada en condiciones la Escuela 2.0
- Dotación individual para el docente, consistente en cualquiera de los elementos anteriores, además de suministrarle una conexión a internet para poder trabajar en su casa, con la finalidad de poder preparar material para su uso en el aula
- Acceso a internet para cada estudiante, en la escuela y en casa. Sería ilógico no suministrar conexión a internet en el domicilio de los alumnos, puesto que mucho trabajo se realiza en red, y la Escuela 2.0 no se ha de restringir al horario escolar
- Soporte en tiempo real de hardware y software, para que tanto alumnos como profesores puedan consultar sus dudas técnicas en cualquier momento y, desde cualquier lugar
- Establecimiento de políticas de uso responsable de esa tecnología, ya que se ha de permitir que el alumno pueda usarla con toda seguridad
Currículum y formación
docente
En referencia al currículum educativo y a la
Formación docente, se habría de realizar lo siguiente:
- Una formación adecuada para que todos los docentes supieran usar la tecnología y aplicar ese uso a su labor docente
- Un desarrollo profesional continuo del docente, con programas de innovación y con unos contenidos educativos más flexibles
- Una capacitación docente previa en el uso de nuevas tecnologías en el aula
- Un currículum que favoreciera las oportunidades de aprendizaje para los estudiantes, pudiendo adaptarse individualmente a los alumnos para motivarlos y fomentar su autonomía
- Una evaluación acorde con el cumplimiento de los requisitos y, mediante un adecuado sistema de superación de competencias
- Una necesaria materia (para docentes y alumnos) sobre la seguridad y privacidad en la red
- Un sistema educativo centrado en el alumno y, no tanto en el inmovilismo pedagógico actual, aunque para ello sea necesario un replanteamiento completo de la palabra “pedagogía”
Y, finalmente entraríamos en el último bloque,
consistente en una Gestión del
cambio, que tiene que venir marcada por:
- Una colaboración entre alumnos, padres, docentes y administración para llevar adelante ese necesario cambio
- Un estudio exhaustivo de ese cambio, con actos reflejos para poder modificar su camino rápidamente, en caso de que se observen disfunciones educativas
- Una mejor redistribución del presupuesto destinado a Educación, ya que, incluso sin modificar su partida, se puede hacer una mejor gestión del mismo
En definitiva, unas ideas, un poco
desorganizadas, que después de todo lo leído y analizado, he pretendido plasmar
en este artículo, para poder llegar a esa Escuela del siglo XXI que nos
merecemos.